El área de Mana Pools en Zimbabwe es verdaderamente un paraíso para fotógrafos y también es ideal para viajeros en busca de aventuras salvajes o simplemente relajarse. Recientemente realizamos un viaje a este impresionante Parque Nacional. Fue un merecido descanso familiar, y elegimos alojarnos en la propiedad de Wilderness Safaris, Ruckomechi Camp. El lujoso campamento safari está a poco más de 400 kilómetros de Harare. El viaje por carretera puede ser bastante accidentado a medida que te acercas al Parque y definitivamente será arduo en los meses de verano, así que volamos en avión privado. Volamos por la mañana y fuimos recibidos en la pista por uno de los guías del campamento, quien nos trasladó al campamento. En nuestro camino al campamento, nos alegró ver a cuatro leonas. A nuestra llegada al campamento, recibimos una cálida bienvenida por parte del personal. Una vez instalados en nuestra suite, emprendimos un informativo tour de orientación con Eddie, uno de los miembros del personal. El campamento está situado en las orillas del río Zambezi, ofreciendo impresionantes vistas al río y muchas avistamientos de vida silvestre justo desde la puerta de tu tienda. Consta de diez lujosas tiendas de campaña, incluyendo dos unidades más grandes que son suites familiares. Las tiendas para huéspedes están espaciadas para garantizar privacidad. Ruckomechi es un campamento abierto que es frecuentado por elefantes que les encanta picotear las vainas de acacia en los árboles circundantes. Nos aconsejaron estar atentos al caminar hacia nuestra tienda o solicitar un escolta en el vehículo del campamento. El área principal consta de una amplia terraza con una piscina y fogata. Hay cómodos asientos en el área principal donde puedes relajarte con un gin tonic y disfrutar del hermoso paisaje durante el día. Por las noches, los huéspedes pueden sentarse alrededor de la fogata y relajarse. Luego tuvimos un brunch a las 11 am; un delicioso surtido de bocados dulces y salados, incluida una deliciosa ensalada de remolacha, papas dulces rellenas, schnitzel de cerdo empanizado, tocino, huevos, etc. Después de la deliciosa comida, descansamos. Durante el calor del día, nos refrescamos en la piscina. Luego fuimos a pescar por la tarde. El campamento tiene una política de captura y liberación pero la actividad es igual de gratificante. Desafortunadamente, no pescamos ningún pez tigre. Estar en el agua fue muy refrescante y en el río avistamos un buen número de animales, como elefantes, cocodrilos, hipopótamos y búfalos. Las riberas del río estaban llenas de Abejarucos Carmesí. Al caer la puesta del sol, fue genial contemplar los hermosos colores del cielo. Regresamos al campamento cansados pero agradecidos por la tarde relajante. La cena fue otra sabrosa comida de ensalada de carne, pollo cremoso y un decadente mousse de chocolate blanco para rematar la comida. Dos de nuestro grupo pasaron la noche en la casa del árbol bajo las estrellas. Tuvieron la suerte de ver un leopardo desde ese lugar elevado. En la tienda, encontramos que nuestra ropa de cama era de la más alta calidad y convenientemente equipada con mosquiteros. A la mañana siguiente, nos levantamos al amanecer y desayunamos ligeramente (té / café o fruta). Procedimos a nuestro safari con Albion, Alby para abreviar. Tuvimos suerte y hubo mucho que ver, incluyendo Antílopes acuáticos, Búfalos, Elefantes, Cebra. Lo más destacado del recorrido fue un Leopardo disfrutando de su presa de Impala en un árbol. Claramente disfrutando del fruto de su caza nocturna. Vimos al gato adulto desde una distancia segura y luego lo vimos bajar y alejarse después de saciar su hambre. Tuvimos un receso en las orillas del Zambezi donde gustosamente pudimos estirar un poco las piernas. Se sirvieron café y galletas y luego regresamos al campamento para el brunch. La mañana llena de eventos nos dejó exhaustos y después de la deliciosa comida, hicimos una siesta en las tiendas. Más tarde en el día, nos dimos un chapuzón en la piscina reluciente y se sirvió algo de té por la tarde a las 3.30 pm. Decidimos intentar pescar de nuevo, pero después de un par de intentos, desafortunadamente no pescamos nada. Antes de regresar al campamento esa noche, el personal había preparado sorpresivos aperitivos al atardecer junto al río. Nos encantó la variedad de refrigerios frescos y sabrosos y habían acomodado cuidadosamente algunas sillas en las orillas del río en un lugar estratégico donde pudimos disfrutar del impresionante atardecer. En el último día de nuestras vacaciones, nos levantamos temprano nuevamente para el desayuno alrededor de las 5:30 am. Esto fue seguido de un traslado fuera del campamento que también sirve como un safari matutino en ruta a la pista de aterrizaje. Estábamos emocionados de avistar las mismas cuatro leonas que habíamos visto en nuestro primer día. Estaban relajándose en un lecho seco de un río disfrutando del calor de la arena. También vimos un Civeta solitario, algunos Jabalíes, Cebras, Búfalos, Impalas y Babuinos. Así terminó nuestra aventura en Ruckomechi mientras volábamos de regreso a casa. El campamento, la experiencia, la ubicación, fueron absolutamente increíbles y recomendamos encarecidamente Ruckomechi para tu próximo safari.